Decime que puedo amarte un rato más, que puedo quererte un rato más, que puedo abrazarte un rato más. Ahora que el aire es más pesado, que el corazón está a punto de rompérseme y que empiezo a sentir las palabras dichas como dagas clavadas.
Quiero tirarme a tu lado; quiero una tarde más de camisas a cuadros y una noche más de sábanas rotas; quiero jugar con tu pelo una vez más; quiero tocar tus dedos; quiero que bailemos en tu habitación y nos riamos como si todo hubiera empezado de nuevo; ahora que todo se terminó, quiero amarte un rato más.
Y sé que todo terminó ahora, pero si mañana ya no vas a ser mío, concedeme este rato más y adiós.
No hay comentarios:
Publicar un comentario